El Tramway de la Boca y Barracas: Mientras se construía la traza del Tramway Central entre las Plazas 11 de Septiembre y 25 de Mayo, Federico Lacroze solicitaba permiso el 9 de Marzo de 1869, para extender otra línea hasta la Boca del Riachuelo. Cuando la concesión le fue otorgada, quedaron prácticamente unidas las Plaza 11 de Septiembre con los arrabales de la Boca, combinación mediante. El 1° de Septiembre de 1870 sale el primer cochea de la línea a la Boca que, partiendo de la Plaza 25 de Mayo circulaba por Defensa hasta Brasil y luego por Almirante Brown hasta Pedro de Mendoza para desembocar en la Ribera del Riachuelo. Las características de los coches, su funcionamiento y personal, eran similares a los ya mencionados para el Tramway Central. El 23 de Enero de 1871, nuevamente se presentan los señores Lacroze al gobierno solicitando la prolongación de la línea a la Boca por la ribera del Riachuelo hasta Barraca Peña y la concesión de un ramal que partiendo de Defensa y Brasil Continuara por la primera hasta la ribera uniéndose en Barraca Peña con Febrero de 1873, quedando así constituida la gran línea de los “Tramway de la Boca y Barracas”. Esta empresa fue transferida unos años después a la sociedad formada por Saturnino Unzué e Hijos y Zemborain Hermanos, quienes eran originariamente fiadores de los Lacroze. Finalmente, tanto el Tramway de la Boca y Barracas como el Tramway Central, en 1887 y 1889 respectivamente, fueron adquiridos por la poderosa compañía Anglo-Argentina, que procedió a electrificarlos hacia 1902. Las fichas del Tramway de la Boca y Barracas: De esta línea se conocen dos tipos, siendo su uso, adquisición, costo y canje por el boleto central del vehículo, similares a lo ya comentado par el Tramway Central.Estas fichas del Tramway y de la Boca y Barracas son de mayor rareza que las del Tramway Central, tal vez por ser de material más frágil y como dato estadístico señalaremos que han aparecido más rojas que negras, siendo las primeras de mayor espesor y peso. En cuanto a los números que ostentan en el anverso, muy probablemente representen a los diferentes ramales de cada propietario del Tramway, en este caso, las líneas 2 y 3 de los Lacroze. Todas estas piezas por sus características y su uso como medio de pago por falta de moneda corriente son verdaderas fichas y por lo tanto no deben considerarse ni incluirse en los catálogos de medallas, como lo hicieron en el pasado tambo Alejandro Rosa como Humberto F. Buzio. Estos sustitutos monetarios en algunos casos pagaban trabajo realizado, en otros servían para la adquisiciones de bienes y en esta caso, las fichas tranviarias se utilizaron para el pago por la prestación de un servicio. Fuente (Centro Numismático de Bs As /https://buenosaireshistoria.org/juntas/los-primeros-tranvias-portenos/ )