Nacido en Barcelona, España, el 23 de octubre de 1888 y fallecido en Buenos Aires en 1968. Pintor y dibujante, cursó estudios en la Escuela Superior de Bellas Artes de Barcelona en 1907 y 1908, año en que estableció en la Argentina prosiguiendo sus estudios en la Academia Nacional de Bellas Artes graduándose en 1915, año en que adquirió la ciudadanía argentina. En 1931 y 1932 realizó un viaje de estudios por España y Francia. Ejerció la docencia en el Colegio Nacional de Buenos Aires, dictó conferencias sobre arte y estética, y publicó el libro Anteo en 1922. Ilustró libros como el Ensayo Crítico sobre Las Rubáiyát de Omar el Khayám de Francisco Propato y el de cuentos, titulado Idolos de bronce de María Alicia Domínguez. Realizó exposiciones individuales en galerías Chandler Zuretti en 1924 y 1925; Witcomb en 1928, 1930 a 1937, 1939 y 1941; Amigos del Arte en 1928, 1938 y 1940; La Peña en 1942; Müller en 1946, 1948, 1950 y 1953; Pares de Barcelona en 1932; Salón Municipal de Buenos Aires en 1939 y en la Intendencia de Buenos Aires en 1952; entre otras. Concurrió al Salón Nacional en los años 1922, 1942, 1943, 1945, de 1948 a 1954, 1957 y 1958; al Salón de La Plata de 1940 a 1949; al Salón de Tandil en 1941; al Salón de Pehuajó en 1941; al Salón de Trenque Lauquen en 1941; al Salón de Santa Fe 1935, 1936 y 1943; al Salón de Avellaneda 1945; al Salón Municipal de Otoño de Buenos Aires 1945; al Salón de Pergamino 1947; al Salón de Segundo Salón de Bahía Blanca; al Salón de Junín provincia Buenos Aires en 1948; al Salón Nacional de Dibujo y Grabado de 1951 a 1953; al Salón de Otoño de Rosario en 1924; al Salón de San Rafael Mendoza en 1936 y a otras muestras de conjunto. Figuró en la Exposición Internacional de Bolivia. Obtuvo, entre otros, Mención de Honor Especial en el Salón de Chivilcoy en 1944, Premio Adquisición en 1946, en el mismo salón. Premio Adquisición Ministerio de Educación en el Salón Nacional en 1949. Diploma de Honor en el Salón del Paisaje Argentino en 1950. Fue un artista de bien logrado impresionismo sus trabajos fueron de una construcción sólida y expresiva, de contornos recortados y o esfumados para exaltar las formas y así unir los volúmenes. Roca y Marsal alternó su producción pictórica con la enseñanza, la que absorbió una buena parte de su tiempo. Sus temas preferidos fueron sus notas urbanas, apuntes vegetales, impresiones portuarias, y sin excluir el tema de la figura. Sus óleos suelen ser breves, realizados con mirar ávido y ejecutados con destreza, José León Pagano, El Arte de los Argentinos, Ediciones l’Amateur, Buenos Aires 1944. Diccionario de Artistas Plásticos de Argentina de Adrián Merlino, Edición del Autor, Buenos Aires 1954.
